Almacenes Convencionales x Automatizados

¿Un almacén convencional o una unidad totalmente automatizada?
La palabra Almacén proviene del árabe Al-mahazán, que significa “ático”. Desde los pequeños espacios entre el techo y el techo hasta los grandes centros de distribución de hoy, han pasado muchos siglos. Las unidades de almacenamiento se han ganado el estatus de una herramienta crucial en la logística moderna. Y los posibles tipos de Intralogística ganaron refinamiento tecnológico a medida que el flujo de productos se hizo más intenso. Actualmente, muchos emprendedores tienen dudas: después de todo, ¿cuál es mejor? ¿Un almacén convencional o una unidad totalmente automatizada? Depende de qué negocio estemos hablando.
Comencemos con los almacenes convencionales. Suelen ser cobertizos grandes que pueden tener o no estantes metálicos en su interior. Depende del producto almacenado. Las operaciones diarias que se realizan no dependen de robots, sino de seres humanos debidamente capacitados para las diferentes funciones presentes en la Intralogística. Por supuesto, se necesitarán máquinas para mover productos, como montacargas, por ejemplo. Aquí también es posible instalar cintas transportadoras, que en Logística llamamos simplemente Transportadores. Pero en todo prevalece el trabajo manual. Si tienes acceso a terrenos baratos y no tienes un gran flujo de productos, esta puede ser la mejor solución. Suele ser más económico y presenta numerosas alternativas para agilizar el trabajo. Todo depende de qué mercancía estemos hablando (peso; dimensiones; vida útil de los productos; posibles restricciones de empaque, como refrigeración y fragilidad; rotación de inventario; flujos de entrada y salida del inventario).
Entre las metodologías que se pueden aplicar en el espacio interno, se encuentra Porta Pallets , un sistema que prioriza el almacenamiento vertical, muy utilizado en supermercados y distribuidores de productos, ya que puede ser utilizado para almacenar artículos de diferentes géneros y tipos en el sitio. Además del modelo convencional, disponemos del Dynamic (sistema vertical que permite apilar artículos, para no trasladar el peso a la mercancía, evitando daños.), Flow Rack (este sistema permite el movimiento interior tanto manual como por equipo, pero para ser implementado, se deben instalar rieles inclinados con ruedas de plástico, permitiendo que la gravedad haga parte del trabajo, mediante una operación FIFO (primero en entrar, primero en salir). Push Back (basado en la metodología LIFO — Last In, First Out). Esto significa que en este sistema los últimos bienes almacenados serán los primeros en ser liberados. Este método se recomienda para existencias compuestas por productos con una vida útil corta y alta facturación).
Básicamente, los almacenes convencionales son más baratos de instalar, pero requieren una gran inversión en mano de obra. Incluso aquí, es recomendable utilizar un software de gestión, para facilitar el control de inventario y el trabajo del día a día. Los almacenes automáticos, por su parte, cuentan con el apoyo de la más moderna tecnología, tanto en materia de automatización como de robótica. Estas unidades pueden construirse en espacios convencionales o en una estructura específica, como un almacén autoportante, de 10, 15 o 30 metros de altura, optimizando el uso del suelo (indicado para regiones donde el metro cuadrado es muy caro). Pero, ¿cómo saber si esta es o no una opción para su empresa? El blog Solística da algunas pautas. Puede optar con seguridad por la automatización cuando:
- “El movimiento y volumen de mercancías es alto, con productos muy variados;
- Se preparan pedidos o se consolidan cargas que requieren clasificar y ordenar productos;
- Si buscas optimizar el proceso para reducir costos;
- Es necesario maximizar el aprovechamiento del espacio con soluciones verticales;
- Si deseas tener un control de inventarios más preciso que te permita aplicar la logística justo a tiempo;
- Y cuando se estima que el retorno de la inversión se puede lograr en menos de cuatro años.”
En un almacén automático, es absolutamente necesario un software de gestión y control robusto, como un WMS. También es interesante la adquisición de un AS/RS (Automated Storage/Retrieval System), que consiste en automatizar los procesos de carga, clasificación, almacenamiento y envío mediante el uso de equipos robóticos y software de gestión. Con este sistema automatizado de recolección y almacenamiento, se reduce la necesidad de mano de obra y se aumenta la productividad y la eficiencia, ya que puede operar constantemente para garantizar que el trabajo se realice a tiempo y bien hecho.
Además de los transportadores, los almacenes automatizados pueden contar con elevadores apiladores, robots que manipulan cargas, sistema AGV (sistema de vehículos guiados automatizados que consta de pequeños vagones o carretillas elevadoras que mueven el transporte de productos por el almacén), carruseles verticales u horizontales, módulo de elevación vertical de lanzadera (o VLM, una solución para almacenar artículos pequeños y costosos en innumerables estantes dentro de equipos automatizados), y sistemas de ubicación de productos en el almacén como Pick to Light (o PTL) y Pick to Voice(o PTV). Todo depende de tu necesidad y del capital disponible. Pero en cuanto a la inversión, tranquilo. Hacer un presupuesto es la mejor manera.
¿Y cuáles son las ventajas de un almacén con tanta tecnología? Son varios:
- Menos accidentes con personas;
- Condiciones de trabajo más adecuadas para los empleados;
- Operaciones continuas, ya que las máquinas no están limitadas a horas;
- Reducción de costos laborales al reducir el número de personas en la operación;
- Conocimiento exacto de los niveles de inventario para evitar escasez, exceso de productos o envejecimiento de los bienes;
- Optimización del espacio de almacenamiento, utilizando sistemas verticales de gran altura.
- Disminución de los costes de mantenimiento, gracias a la reducción de daños en bienes o estructuras.
- Mayor seguridad y menor contaminación de la carga, ya que no está expuesta a la manipulación humana.
- Eliminación de errores humanos en la documentación, que podrían suponer retrasos en la tramitación de la mercancía.
- Mejora el tiempo de entrega y la precisión.
- Un mejor nivel de especialización y cualificación de la mano de obra, que ofrece más servicios profesionales, lo que la hace más eficiente y productiva.
En resumen, vale la pena invertir en un buen almacén, ya sea convencional o automatizado. Hay muchas posibilidades entre estas dos opciones. ¿Quieres saber cuáles? Manténgase en contacto con nosotros. Águia Sistemas es líder nacional en soluciones de Intralogística, tanto para espacios convencionales como automatizados.
Video – Solución Intralogística Completa
Almacenamiento y Movimentación Automatizados